viernes, 18 de mayo de 2012

         
 QUO USQUE TANDEM, SR. RAJOY

Tristes, apaleados, inquietos, indignados (aunque no se pertenezca al Movimiento 15-M)
Enrabietados, asustados, engañados (señor Rajoy, señora de Cospedal, señora Sáenz de Santamaría…)
Puteados (perdón)
Asfixiados, privatizados, empobrecidos (tranquilos, queda dinero para Rato, je, je)
Humillados, ofendidos, acojonados (otra vez perdón)
Estafados (algunos lo barruntábamos)
Angustiados (cada viernes cuando se reúne el Consejo de Ministros) Impotentes (nada que ver con el sexo)
Turbados, amedrentados, jorobados, crispados (con los datos falsos y la charlatanería del ministro Wert)
Criminalizados (¡atención manifestantes, obreros, hordas de melenudos y parados de pelaje diverso y sospechoso!)
Estigmatizados (rojillos de mierda, progres de pacotilla, analfabetos y vagos andaluces, separatistas catalanes)
Paralizados sorprendidos, inermes, anestesiados, ensombrecidos, parapléjicos (nada que ver con la movilidad)
Enfurecidos, sublevados, descompuestos (cada vez que comparece el ministro Montoro)
Insultados (más hieráticos que el rostro del busto de Nefertiti, nos toman por tontos cuando nos mienten)
Indefensos, timados, birlados (de nuestros derechos conseguidos a base de esfuerzo y lucha para que ellos puedan seguir disfrutando de sus privilegios, de sus altas rentas, retiros millonarios y altos sueldos)
Idiotizados, boquiabiertos (es grosero y zafio el desparpajo de Rajoy y sus adláteres cuando dicen “donde dije digo, digo Guindos)
Encrespados, descompuestos, encabronados (excusas mil)
Abatidos, mustios (más que hoja de acelga fuera del frigorífico)
Cabizbajos, macilentos, vareados (cual olivo martés)
Aporreados, zurreados (cual gato callejero)
Exasperados (cuando nos mienten sobre el iva, el copago en sanidad, la subida de impuestos, los recortes en sanidad y educación, el abaratamiento del despido)
Pisoteados (cuando frente a los veinte días de indemnización por año trabajado a cualquier obrero, a Rato, por dimitir y dejar en Bankia un agujero más grande que la isla de Groenlandia, lo indemnizan con 1,2 millones de euros. Sencillamente obsceno)
Oprimidos, estrangulados, denigrados ( ¿se acuerdan del “pitas, pitas” que decían las gracietas de Esperanza Aguirre?)
Escuálidos (cual dómine Cabra)
Famélicos (cual Carpantas)
Anonadados, errabundos, pesimistas, vejados, marcados, sojuzgados, indefensos, desarmados, tocados y hundidos.
Sociedad del Bienestar delenda est.
¿Quo usque tandem abutere, Sr, Rajoy, patientia nostra?
    
                                                                                      Luis Martín Ruiz

sábado, 17 de marzo de 2012

COYUNTURA ECONÓMICA Y FILOSOFÍA POLÍTICA

COYUNTURA ECONÓNICA Y FILOSOFÍA POLÍTICA

Como anillo al dedo. La excusa perfecta. Sin miedos, sin complejos.

Ahora es la nuestra – han dicho -. Y nos las están dando todas en el mismo sitio y por todos lados. ¿Qué puñetas es eso del Estado del Bienestar? Los lujos no pueden estar al alcance de todos, entonces no serían lujos ¿Qué se han creído ustedes? Siempre ha habido ricos y pobres. ¿Acaso puede existir el blanco sin el negro? Seamos serios – vuelven a decirnos -. ¿Libros gratuitos? ¡Qué despilfarro! ¿Para qué tanta medicina gratis? Los viejos tienen sus ahorrillos, que paguen.

Como anillo al dedo. La excusa perfecta. El cordel que ha hecho bailar al trompo. El clavo que necesitaban para dar el martillazo.

No solamente tienen ustedes que apretarse el cinturón, tienen ustedes también que adelgazar – nos amonestan serios y rotundos desde sus poltronas recientemente adquiridas -. Adelgazar para comer, bajar para subir, abaratar para ganar, despedir para trabajar. ¿Cinismo o perversión?

Como anillo al dedo. La excusa perfecta. El simple clic del interruptor que pone en funcionamiento la maquinaria.

Juegan con nosotros y no sienten ningún rubor cuando manipulan tan groseramente los conceptos: a subir los impuestos le llaman, sin que se les note la risa, recargo temporal de solidaridad. A la rebaja del sueldo del trabajador le dicen ahora devaluación competitiva del salario. Para ellos no existe ahora recesión, existe un crecimiento económico negativo. A pagar por las recetas médicas se le llama tique moderador sanitario…. La lista de atropellos a la inteligencia es larga y tan vieja como el poder del que ellos han hecho uso y abuso a lo largo de la historia y del que se creen únicos y legítimos herederos.

Como anillo al dedo. La excusa perfecta. El rayo que activase la tormenta. Quieren hacernos olvidar que fueron ellos quienes alimentaron esa tormenta. Dijeron que era indecente subir impuestos y fíjense por dónde van ahora nuestros actuales rectores. La bronca, el insulto y la descalificación permanente fueron sus armas. Ahora se lo cobran, con creces, y aplican sin ninguna duda, sin ningún miedo, sin ningún complejo su filosofía política que no es ni más ni menos que desmantelar el Estado del Bienestar, recortando en el gasto social y las ayudas a las clases trabajadoras y más desprotegidas. De un plumazo, en un visto y no visto, se han cargado cualquier derecho laboral que pudiera tener un trabajador. Así, está la Patronal y la Gran Banca, dándose al tango por las esquinas, henchida de satisfacción y más alegres que castañuelas. Los lujos, el bienestar, la seguridad, la sanidad, la educación…para quien pueda pagarlas. Así de sencillo. Sin complejos, sin miedos y hablando en plata. Lo demás son (como a ellos les gusta decir) sólo milongas.

Coyuntura económica y filosofía política. Aprovechar el momento económico para aplicar con extrema dureza la filosofía política. Anillo y dedo, rayo y tormenta, clavo y martillo. Trompo y cordel.

viernes, 3 de febrero de 2012

LA GOMA DE BORRAR Y LA JUSTICIA CIEGA


LA GOMA DE BORRAR

Es mágica. Todo lo limpia y abrillanta. Esta especial goma de borrar, por arte de birlibirloque, es capaz de eliminar cualquier pátina de suciedad. Aún más, cualquier costra de inmundicia y bajeza moral.

La infamia, el robo, el lucro desmedido y vergonzante, la falsedad y el cinismo, todo, absolutamente todo, lo manda en un plis plás al limbo de lo no existente.

Actúa también esta peculiar goma de borrar sobre la memoria, borra palabras dichas y escritas, conversaciones, promesas hechas y dádivas ofrecidas, melosas palabras de amor y amistad eterna, reproches cariñosos y despectivos insultos.

Cualquier mácula, grande o pequeña, este prodigio de goma la hace desaparecer.

¿Cuántos millones de españoles habrán escuchado estos últimos días las conversaciones telefónicas mantenidas por el expresidente de la Generalitat Valenciana, señor Camps, y su “amiguito del alma” “el Bigotes”, que harían enrojecer de bochorno hasta a la Esfinge de Tebas?

¿Cuántos millones de españoles han escuchado, atónitos, con los ojos abiertos como platos por el estupor, lo de los regalitos, el caviar, los trajes, los relojes, los bolsos, las corbatas de Hermès, las promesas de amistad y cariño entre el señor Camps y el tal “Bigotes” jefe en Valencia de la Gürtel, empresa a la que se investiga por financiar supuestamente al PP?

Pues bien, esa especial goma de borrar mágica se pone en funcionamiento y hace desaparecer todo ello y viene a decir que todo eso no existe, patrañas, infamias inventadas. No culpables, limpios, inmaculados y brillantes. En una palabra, vamos, que somos gilipollas.

LA JUSTICIA CIEGA

No entendía muy bien de pequeño eso de que “la Justicia es ciega”. Después me lo explicaron. La metáfora o simbolismo venía a decir que todos somos iguales ante la ley.

Ahora, con mis sesenta años a cuestas, debo de haber sufrido una regresión. Vuelvo a no entenderlo muy bien, y es que hay muchos tipos de ceguera.

No hay peor ciego que el que no quiere ver – dice la sabiduría popular. Está el que mira para otro lado para no ver lo evidente. Podemos ir más lejos y aplicarle otras connotaciones a la palabra ceguera: empecinamiento, ciega es aquella persona incapaz de ver opciones existentes y distintas a la suya propia. Ciego de ira, ceguera intelectual…ceguera judicial.

¿Qué concepto de ceguera tendríamos que aplicarle a la Justicia española? Tengo la sensación que otros muchos como yo piensan que la Justicia debería quitarse la venda de los ojos y mirar de frente y a la cara para no tener que ocultar su sonrojo ante algunas de las últimas actuaciones y decisiones tomadas.

¿Alguien entiende lo del juez Garzón? ¿Alguien entiende lo que está ocurriendo con este juez que no quiso mirar para otro lado en el caso de corrupción y financiación ilegal? Pero lo más grave de todo y lo que no se le perdona al juez Garzón es que, además de no querer ser ciego, no quiso ser sordo y dejar de escuchar los cientos de miles de voces de los represaliados y fusilados tras la Guerra Civil que surgían y siguen surgiendo aún desde las cunetas y descampados de este país.